Los líderes del sector público y privado, así como la academia, participan en la industria de la biotecnología agrícola para revisar sus logros, innovaciones y establecer planes futuros del sector
SAN JUAN, Puerto Rico - Luego de un año de retos a mano del paso de los huracanes Irma y María, la Puerto Rico Agricultural Biotechnology Industry Association (PRABIA, por sus siglas en inglés) celebra hoy y mañana la décima edición de su evento cumbre, la Convención Bianual de PRABIA. El evento reúne profesionales locales e internacionales de la industria, académicos y líderes del sector público para explorar variedad de temas y evaluar los logros, innovaciones y planes futuros de la industria.
Según Sol Rosado, la recién electa presidenta de PRABIA esta Convención “es una importante plataforma para recalcar el rol significativo de nuestra industria para atender temas apremiantes como la seguridad alimentaria y las innovaciones que surgen dentro del sector agrícola”.
Por su parte, Beatriz Carrión, directora ejecutiva de PRABIA, señaló que “a través de los paneles y presentaciones de esta Convención, queda claro que Puerto Rico es crisol de la investigación y desarrollo en este sector, y a nivel de industria local, estamos idóneamente posicionados para impulsar el crecimiento socioeconómico del País”.
En un panel compartido en el primer día de la convención, el subsecretario del Departamento de Desarrollo Económico y Comercio, Lic. Javier Rivera Aquino y el secretario del Departamento de Agricultura, Carlos Flores Ortega, hicieron eco al planteamiento de Carrión.
“Reconocemos la valiosa aportación de la biotecnología agrícola a la economía puertorriqueña, no sólo por la inversión realizada y el retorno de inversión reflejado; sino también por las oportunidades de empleo que han creado para cientos de profesionales puertorriqueños. También es positivo servir como sede de investigación e innovación para crear productos conducentes a mejorar la calidad de los cultivos alrededor del mundo y contribuir a la seguridad alimentaria. Nuestro Gobierno continuará fungiendo como facilitador para que este sector dedicado a la investigación e innovación continúe expandiendo operaciones en Puerto Rico y atraer nuevas inversiones que contribuyan a diversificar la economía puertorriqueña y aporten a su desarrollo”, manifestó Rivera Aquino.
En su intervención, Flores comentó: “Este sector está altamente regulado y las empresas de PRABIA están en total cumplimiento. A través de la tecnología que aporta la industria y las empresas que la integran, hemos rescatado nuestras tierras y generado empleos que aportan al desarrollo económico de Puerto Rico”.
En esta décima edición de la Convención Bianual de PRABIA participan agrónomos y otros científicos tanto de Puerto Rico como de países como México, Estados Unidos y otros. Algunas de las presentaciones atienden temas como el impacto de la industria de la biotecnología agrícola en Puerto Rico, los avances tecnológicos en el sector, innovación en la protección de cultivos y las soluciones integradas agrícolas.
La importancia de la biotecnología agrícola. Las actividades de las compañías miembros de PRABIA aportan anualmente $80 millones a la economía local e incurren en cerca de $130 millones en expendios en la Isla. Este sector también es el principal reclutador y patrono de talento local, en particular aquellos graduados de universidades locales especializados en agronomía y ciencias relacionadas.
Esta industria también es clave para el desarrollo socioeconómico del País. La innovación que se da en Puerto Rico tiene alcance global y tiene el potencial de insertar aún más a la Isla en la economía del conocimiento global. Más importante aún es el rol de la industria en Puerto Rico para el bien del planeta. ¡Se estima que para el año 2050 la población mundial sobrepasará nueve mil millones de personas! Todos los países se están preparando y Puerto Rico – con su clima, recurso humano, infraestructura, incentivos y otras ventajas – tiene la delantera para hacer una gran diferencia por medio del descubrimiento y el conocimiento.